(Reflexión durante un taller de fotografía).
El horizonte, según uno se posicione en este mundo, puede apreciarse (y quizás sufrirse) desde diferentes enfoques.
Una posibilidad es la del equilibrio intermedio, en la cual el cuerpo, ubicado de manera vertical, predispone a una observación contemplativa neutra, instancia ésta donde el cielo ocupa el mismo espacio que la tierra, todo allí se encuentra compensado, nada debería alterar esa armonía.